jueves, 19 de marzo de 2015

RENACER

Renacer. Acuarela 28 x 38 cm


Mañana es un día mágico y poderoso. Coincidirán el equinoccio vernal de primavera en el hemismerio norte, la luna nueva y un eclipse de sol total. La última vez que esto sucedió fue en 1662.
El eclipse siempre anunció un cambio de ciclo o final de era, por eso a los que gobernaban no les parecía un buen augurio. La luna nueva anuncia nuevos tiempos de siembra y renovación. Ambos representan la falta de luz, la noche oscura del alma. Pero lo maravilloso en este caso es que el eclipse traerá la primavera.
Mucha gente a mi alrededor, yo incluida, tenemos la sensación de densidad y cansancio. Parece que el cuerpo pide descanso, silencio y Naturaleza. Es tiempo de dejar a un lado todo lo que no es imprescindible.Soltar todo lo que ya no nos sirve para poder renacer de nuevo. Ponerse en paz con todo. Honrar a nuestros ancestros, agradecerles por darnos la vida y  sentir que ya no tenemos que cargar con su dolor, su tristeza, su sensación de abandono, o lo que quiera que ellos vivieran. Quedarnos con el potencial que aportaron cada uno de ellos a nuestros árboles genealógicos y desde ahí seguir adelante renovados.
Este eclipse solar traerá la primavera al hemisferio norte ( y el otoño de cosecha y recogimiento al Sur).
Es tiempo de celebración. Tiempo para volver a conectar con nuestro niño interior. Tiempo de juego y tiempo de creación. Tiempo de cerrar los ojos, conectar con el corazón y soñar cómo es ese mundo maravilloso en el que nos gustaría vivir. 
El 21 de Marzo, a las 12:12h de la mañana mucha gente se unirá para soñar juntos. Te animo a que te unas. 

2 comentarios:

  1. Sabias palabras Olga. Así sea, amiga.

    Salud y energía.

    Miguel de Oteruelo

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  2. Ahora los propios sueños nos están despertando y vindican hacerse realidad. Otro mundo está siendo posible. Esa "sensación de densidad y cansancio" a la que haces referencia es el síntoma de que ya no podemos seguir viviendo con los esquemas del pasado. Tenemos alternativas más auténticas y próximas a nuestras raíces. Podemos reciclar los estereotipos, las poses y lo superfluo para quedarnos con lo primordial, lo esencial y auténtico.
    Como una auténtica Ave Fénix, cada persona ha de renacer desde el momento presente. El momento es ahora.
    Un sórico abrazo.
    Celia

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